Mateo 25:31-33: Cuando el Hijo del Hombre venga en su gloria, y todos los santos ángeles con él, entonces se sentará en su trono de gloria, 32 y serán reunidas delante de él todas las naciones; y apartará los unos de los otros, como aparta el pastor las ovejas de los cabritos. 33 Y pondrá las ovejas a su derecha, y los cabritos a su izquierda.
"LAS OVEJAS Y LOS CABRITOS" por Jesús Castelazo.Mensaje dado en el Centro Cristiano Calacoaya, con motivo del Serviseminario 2001 Puede usarse mencionando fuente y autor Disponible en audio y video cassette. Tel: (5)361-1711 – Fax (5)361-5870 Página web: www.ccc.org.mx e-mail: ccc@ccc.org.mx
La Biblia dice más de 40 veces que el hombre puede actuar como animal, como víbora, como perro, como burro, como mulo, como zorra. Siendo que fuimos hechos a imagen y semejanza de Dios podemos descender muy abajo.
Ante Dios no es el color de tu piel, no es tu religión, no es tu sistema de gobierno; en aquél día solo habrá para Dios dos clases: izquierda y derecha, dos destinos: vida eterna, o castigo eterno.
Jesús conocía lo hábitos de las ovejas y los cabritos, ¿no les sorprende que no habló de otro animal? ¿Por qué no dijo las gallinas, los pájaros, los patos; escogió ovejas y cabritos, seguramente Él sabía porqué. Meditemos en las características de estos dos animalitos:
CARACTERÍSTICAS DE LAS OVEJAS:
1) La oveja es un ser indefenso: no tiene uñas para arañar, no tiene dientes para morder, no tiene cuernos para herir; la oveja no pelea. Y los que son ovejas de Dios tampoco pelean, sino que todo lo sufren, todo lo esperan, todo lo soportan, no piensan el mal, no usan armas. Las ovejas de Dios son muy inocentes, no son personas de pelea aunque pasemos por abúlicos y nos pongan otros motes; y es que la verdad es que no vale la pena pelear, en un pleito el que pierde el pleito pierde la gloria y el que lo gana, gana el infierno, así que mejor no pelear.
2) La oveja es un ser pacifico: se deja esquilar, se deja atar, incluso sacrificar sin poner obstáculo, no ofrece resistencia. Usted puede estar matando a un cordero a dos metros y nadie se da cuenta que está matando un cordero; no es lo mismo que los gatos o los perros; los marranos por ejemplo, hacen un escándalo. En los pueblitos, en las montañas donde predicamos, cuando va a ver chicharrón, al marrano lo matan como a las 2 de la mañana pero todo el pueblo oye sus gritos y dicen: va a haber chicharrón; si vendieran carne de oveja nadie se da cuenta porque la oveja no grita.
Qué sorprendente que el Señor haya escogido estos animales para ilustrarlo; la oveja se deja esquilar, se deja atar, incluso sacrificar sin poner obstáculo; con justa razón al Señor se le llama Cordero de Dios que quita los pecados del mundo. El dijo: aprended de mí que soy manso y humilde de corazón.
No recuerdo cuántas veces levantó el Señor la voz; solamente cuando veía la injusticia, generación de víboras les decía, pero por lo regular era una persona tranquila.
La oveja es un ser indefenso, pacifico y también es un ser útil, porque todo se aprovecha, su carne para alimento, su lana para ropa, su piel para muchos usos, hasta sus cuernos, para tocar en la fiesta. ¡que animal tan maravilloso!
3) La oveja es útil: las ovejas de Dios se distinguen por liberales, útiles, serviciales, una aplicación sería: todo lo de los cristianos se aprovecha, sus manos, sus cantos, sus cerebro, todo su cuerpo, para el Señor.
El Señor ha dicho: vosotros sois la luz del mundo y la sal de la tierra.
Un cristiano debe convertir toda su vida, todo lo que haga en una bendición; el apóstol Pablo lo ilustra más o menos así: si coméis o bebéis o hacéis alguna otra cosa, hacedlo todo para la gloria de Dios.
Cuanto hagamos, puede convertirse en una bendición para la familia, para el barrio, para el pueblo, incluso para un país.
4) Una oveja es un ser que sabe alimentarse: una oveja come en un solo lugar y procura saciarse; en lugares de delicados pastos me hará yacer; junto aguas de reposo me pastoreará.
Dicen que la oveja no toma agua en corrientes, sino en aguas tranquilas; en un laguito, en un remanso, allí toma agua porque es una oveja que respira tranquilidad, respira paz.
Las ovejas de Dios nunca están hambrientas, comen en los terrenos de Dios; ya saben dónde está la comida y ahí van aunque sea un templo pequeño o enorme, tienen su lugar donde comen las ovejas de Dios.
5) Una oveja conmueve con su lenguaje: no berrea, no grita, no ladra, no rebuzna, no aúlla, nada de eso hace la oveja, su balido es lastimero y conmovedor; las ovejas de Dios siempre tienen un lenguaje que conmueve porque es la palabra de Dios y cuando una oveja de Dios ora como dice la Biblia: hemos de pedir como conviene, no lo sabemos, pero el Espíritu Santo pide por nosotros con gemidos indecibles. Qué hermosas son las oraciones de los cristianos, qué hermosas son las oraciones de aquellos que sienten carga por los que están sufriendo. La Biblia nos habla de los sacerdotes del baal que estaban gritando, pegando aullidos, sajándose con cuchillos, pero baal estaba tan muerto como ellos y no le escuchaban. En cambio, las ovejas de Dios siempre tienen un lenguaje que conmueve.
¿Verdad que los cristianos no gritan? - Ándale vieja, te estoy diciendo que...
- ¡Muchachos...! Un grito, a veces ni para los animales
El Señor define las características de este animalito y deben ser idénticas a las nuestras como ovejas del rebaño del Señor.
No se nos olvide: es un ser indefenso, es un ser pacifico, es un ser útil, es un ser que sabe alimentarse, es un ser cuyo lenguaje conmueve. Escudriñemos la Sagrada Escritura y procuremos adaptarnos a ese ejemplo, a ese animalito.
CARACTERISTICAS DE LOS CABRITOS:
1) En todo tiempo están listos para hacer daño: ¡Cómo les gusta el pleito a los chivos! dar de topes, subirse a cualquier cosa, brincar la cerca, son muy traviesos.
El hombre que pierde la fe no tiene paz, no tiene juicio espiritual, es heridor, es vengativo, es rencoroso, no perdona, le gusta criticar, le gusta dividir, halla placer en la violencia.
No sé si a ustedes les dé tristeza como a mí: en estos tiempo he conocido a varios cristianos, que les están enseñando "karate" a sus hijos pequeños; los están enseñando a ser cabritos. Enseñan a los niños a pegar patadas, cuando que el Señor ha dicho que de ellos es el reino de los cielos; en lugar de enseñarles a ser ovejas les están enseñando a ser cabritos; esa es la verdad.
Los cabritos están listos para hacer daño en todo tiempo, les gusta brincar, dar de topes, subirse a cualquier cosa, brincar la cerca, son traviesos. El hombre que no tiene fe, que está lejos de Dios no tiene paz, no tiene juicio, anda de aquí para allá, es heridor, es vengativo, es rencoroso, no perdona, le gusta criticar, le gusta dividir, es una máquina de atacar, de hacer daño, características de los cabritos.
2) Huelen mal: tienen un "tufo" terrible, lo despiden debido a su vida inquieta. Un cabrito huele a muchos metros; lo contrario de las ovejas La buena fama es como el buen ungüento dice la Biblia; así una mala persona tarde o temprano se hace de mala fama; el hombre que frecuenta prostibulos huele mal, y aunque se haya bañado tres veces huele mal. Al que el gusta el alcohol, igual, y si fuma con más razón.
Un hermano que tenía tiempo de convertido no podía dejar el tabaco y una vez lo encontré; cuando me vio, puso la mano con el cigarro atrás y empezó a sonreírme, pero el humo le salía por un lado
- Le digo: termíneselo porque se le va a quemar la mano si seguimos platicando
- ¡Ay, hermano! Perdóneme - ¿Y yo porqué lo voy a perdonar? ¡Que lo perdone
Dios!
Mientras usted no haga oración, ayune y le pida a Dios, mientras usted no se identifique con Dios usted va a seguir fumando hasta que le aparezca cáncer en los pulmones o en la garganta. Usted no va a poder quitarse eso, porque necesita el poder de Dios, la ayuda de Dios.
Una persona que vive mal, huele mal y si tiene la costumbre de no pagar sus deudas, se hace de mala fama, y hay algunas personas que tiene un lenguaje terrible.
Los que viven en los ranchos dicen: es que así le tengo que hablar al burro, tengo que acordarme de la mamá del burro, tengo que decirle para que camine ¡pero si es burro! ¿qué entiende el animal de buenas o de malas palabras? Jesucristo dijo: de la abundancia del corazón habla la boca.
Un hombre que tiene mal lenguaje es porque el mal está en su corazón, no en su boca; puede echarse perfume en la boca y si es mujer puede pintarse de un coloradito muy bonito pero el mal está adentro.
Los cabritos no solo están listos para hacer daño sino que huelen mal; un hombre que tiene malas costumbres, que no paga sus deudas, el tufo del pecado no lo puede ocultar; una persona mala, hombre o mujer, a la larga se hace de mala fama y lo conocen.
3) Van de un lado a otro: Un cabrito va de un lado a otro, come de todo, cáscaras, papeles, trapos viejos, muerde todo, no se alimenta bien, ni en un solo lugar.
Cuándo yo tenía como diez años, era pastor pero de animales, y tenía unas cuantas vacas, borregos y alguno que otro chivo que me daban a cuidar; no eran mías, no se me puede olvidar. Una vez íbamos de regreso al redil y pasamos enfrente de una vecindad, y un cabrito se quedó mirando y que se mete y detrás de él se fueron todos; y que empiezan a comerse las flores, y a jalar los trapos del tendedero y las señoras empezaron a gritar, se armó allí la cosa. Hubo un tumulto, ese día me fue muy mal, por un cabrito que se le ocurrió meterse allí y arrancar todo.
Los cabritos van de un lado a otro, comen de todo, no se alimenta, es una cosa terrible. Creo que el Señor por eso puso este ejemplo, cuando las personas están lejos de Dios.
No aman a su iglesia, les da lo mismo cualquiera, van y se meten en una, luego van a la otra; yo los conozco. Por cierto había un hombre anciano que le gustaba ir por aquí, por allá y le dije:
- ¡Hermano, afírmese! - Es que ando sirviendo a mi Señor, Dios está en todo lugar.
- Cuando se murió ese hermano, nadie fue al velorio ¿qué pasó?
- Pues, ¡yo creía que era tuyo! dijo un pastor
- Yo creía que era tu oveja dijo el otro pastor
- No, yo creía que era tuyo, se metía en tu lugar, Y nadie fue.
La Biblia dice: obedeced a vuestros pastores, sujetaos a ellos; a mí se me han ido varios y cuando los encuentro les digo:
perdóneme hermano, de veras, perdóneme, ¿tanto le ofendí que ni adiós dijo?.
¡No, no hermano!. Entonces ¿por qué se fue?
No creí hacer mal a nadie, simplemente sentí ir a otra iglesia a ver
Le digo, mire: usted me pone en mal y se pone en mal usted, ¿por qué?
Porque a mí me preguntan: ¿verdad que el hermano fulano se fue porque usted lo ofendió? ¿por qué se fue si era tan fiel? ¿Algo le ha de haber hecho? y me pone en mal.
Y otros me dicen: ¿verdad que don fulano se fue porque tiene dos señoras? o no tiene usted..... No, no, no.
- Pues siquiera avise. Dígame voy a aquella iglesia; si es evangélica yo lo llevo, pero si se va usted así nomás, usted brinca la cerca y se lo puede comer el coyote ¡Arrepiéntase!
- El Señor dice que obedezcamos a nuestros pastores, pero un cabrito no anda por todos los lugares. La Biblia dice que hay un sólo camino, no hay muchos. Muchos caminos pueden "llevar a Roma" pero sólo uno lleva al cielo: Jesucristo.
Afirme sus convicciones, yo le digo a la iglesia: hermanos, si alguno de ustedes puede ayudarle un poco más que yo, ¡Avíseme! yo lo recomiendo. Yo hago lo que puedo, estoy ayudándole, pero no ande de aquí para allá porque le puede ir mal.
Una persona que anda de aquí para allá, nunca afirma su fe ¡Jamás!. Y el diablo puede meterle ideas que, es mejor estar firmes.
Un cabrito prueba toda doctrina, nunca examina las cosas con la Biblia, come de todo, dice:
toda religión es buena, no tiene convicción firme, no tiene paz en un culto de oración, no la aguanta, sale y entra, está inquieto; todo lo espiritual le es superficial, no entiende las cosas del Espíritu porque está en la carne.
4) Los cabritos tienen mal lenguaje: si alguien mata un cabrito desde aquí lo oímos, si matan a una oveja, a dos metros nadie se da cuenta. Rara vez se oye gemir a un cabrito, sólo gritan y gritan muy fuerte; el hombre carnal es más lo que habla que lo que hace; promete y no cumple; cuando ora solo pide auxilio, pero no pide por otros, no pide por los que sufren, nada más está pidiendo auxilio.
Por supuesto nosotros pedimos auxilio de Dios que nos ayude, pero hay personas que solamente gritan "nada más yo, después yo, nada más yo y por último yo" pidiendo auxilio. No gimen por otros, no adoran, no agradecen, sólo están buscando defectos, se convierten en un "fiscal espiritual". En la mayoría de los casos siguen reclamando sus derechos, poco o nada ayuda lo que dicen.
El que ve un borrego dice: que buen suéter me puede salir de aquí y el que ve un cabrito dice: qué buena funda de pistola me va a salir de aquí...
El Señor Jesucristo nos habla de las ovejas y de los cabritos, hay mucha diferencia; espiritualmente tiene una afinidad con la manera de vivir de muchas personas.
Nosotros tenemos que examinar siempre nuestras convicciones y ver si vamos adelante, o vamos hacia atrás, o estamos estancados. La vida cristiana no puede estar en un nível, o va hacia arriba o va hacia abajo.
Yo tengo la costumbre de preguntar: ¿Cómo estás?- Bien, hermano!, ¿Qué dice tu
vida espiritual?....... ¡Ay, entreveradita! ¿Qué cosa es eso de entreveradito?,
Ratos mal, ratos bien, ratos caliente, ratos fríos
Hay hermanos que padecen "paludismo espiritual", de repente se dan unas consagradas hasta el cielo, después, se les agota la batería.
¿Qué pasó hermano?, Ore por mí ¡Ya pequé!
Y al rato vuelven a subir, qué tal si la muerte los agarra en la parte de abajo ¡Se pierden! Hay que estabilizarse; como alguien dijo: es como andar en bicicleta, si no pedaleas te caes.
Acuérdense de Proverbios 4:18: La senda de los justos, es como la luz de la aurora que va en aumento hasta que el día es perfecto, y la vida de una persona que no se ha entregado al Señor no puede ir hacia arriba, va hacia abajo; eso es natural porque cuanto más mal hacemos, más nos dañamos a nosotros mismos, más ofendemos al Señor; no puede irnos bien, además hay un adversario terrible.
Yo escuché predicar a una hermana en Tlaxcala y no se me olvidan sus palabras; decía en su mensaje: ¿Tú crees que Satanás te quiere hacer daño? ¡No es cierto! Él te quiere acabar, el quiere hacerte garras y enviarte a donde jamás te vuelvas a levantar ¡Y eso es cierto! Jesús lo dijo: el ladrón sólo viene para robar, matar y destruir.
Conclusión: No existe animal, mitad oveja, mitad cabrito. Sería un "borre-cabra". La manipulación de la ingeniería genética, si mezcla los genes, saldrá un animal mitad borrego y mitad cabra ¿se podrá en lo espiritual? A mí se me hace que el enemigo está queriendo hacer "borre-cabras espirituales".
Conozco algunos así, que piden dinero y no lo pagan: borre-cabra.
Otros muy amorosos con su esposa, pero por allá tienen su segundo frente; casa grande, casa chica y casa mediana, y dicen ser cristianos y bautizados: borre-cabra; yo creo que hay muchos. Cristianos que a veces sueltan palabrotas: borre-cabra.
El asunto espiritual es serio; usted puede jugar con cualquier otra cosa de la vida pero con el asunto espiritual ¡No, señor! Tenemos que ver qué clase de gente somos.
Una vez encontré un hermano que tenía otra señora y le dije:
¿Qué pasó hermano? El Señor dice que una sola esposa.
Sí hermano, tiene usted mucha razón pero es que mi esposa está enferma, ya tiene mucho tiempo enferma, y yo, pues soy de carne... Mire que inocente, pobrecito chivito, pobrecito cabrito.
En lugar de que ayunara por su mujer o se pusiera a ayunar para que su carne no le ganara, se disculpaba porque su mujer estaba enferma por meses; tenía que tener otra señora porque no podía vivir sin señora.
Abundan los borre-cabras, pero nosotros tenemos que decidir, claramente dice el evangelio: los cabritos a su izquierda y las ovejas a su derecha. No existe animal espiritual, pero en este tiempo está apareciendo.
Dios rechaza a los tibios ¿Quién puede cambiar un cabrito en oveja? Solamente Dios, no la iglesia, no el pastor, no la religión, no las terapias, solo Dios puede cambiar la naturaleza mala de un hombre en un santo.
El evangelio dice: irán estos al tormento eterno y los justos a la vida eterna; hay que ver esa finalidad, dónde van unos y dónde van los otros. Si es usted oveja y tiene problemas no se preocupe usted tiene un pastor (bueno dos: uno en el cielo y otro aquí, bastaba con uno y ahora tenemos dos ¡Gloria a Dios! ).
Si usted tiene problemas tenemos un pastor que nos cuida, el Salmo 23 nos dice como nos cuida el Señor, y el Nuevo Testamento nos habla del cuidado de los pastores.
Si es usted oveja y tiene problemas, no se preocupe, piense que Dios, nuestro pastor, está para ayudarnos, bajo una condición; si usted reconoce el derecho de propiedad, porque muchas veces le decimos a Dios: acuérdate Señor que está escrito: aunque ande en valle de sombra de muerte y que me darás agua tranquila y me darás de comer; sí, pero no nos acordamos que dice: Jehová es mí pastor.
Muchas veces reclamamos que el pastor no nos ha dado lo que ha prometido y no somos su oveja, primero hay que ser oveja para tener derecho al cuidado de un pastor.
Solo Dios puede transformar un cabrito en oveja, y lo hace de cinco maneras; se lo voy a explicar:
1) La fe en Jesucristo nos opera el corazón:
El bautismo es la primera declaración pública en que nos declaramos enemigos del pecado y nos declaramos ovejas.
Traten de comprenderme, salga a la calle y pregúntele a cualquiera: ¿Usted cree en Cristo? ¡Pues claro que sí! Todo el mundo dice que cree en Cristo y todo mundo celebra la "navidad", y todo mundo celebra la semana santa a su manera, como también celebran el "halloween"
Saben que vino Cristo pero no creen en Él, no tienen fe. La persona que cree en Cristo es porque ha reconocido que necesita un Salvador, a Jesucristo. A Jesús le han llamado "de los grandes iniciados", un gran filósofo, el gran arquitecto del universo ¡No es cierto! hizo las estrellas y todo, pero Jesús, su trabajo, su persona, todo su ministerio es salvar y sólo puede salvar a aquel que reconoce que está perdido; si alguno nunca lo reconoce, está perdido, Cristo no puede hacer nada por él.
Lo primero que hace Jesús, seguro que sana, seguro que ayuda y yo creo que ha ayudado a muchos como la mujer que dijo: tengo derecho a las migajas, vengan las migajas.
Jesús es Salvador desde el día en que nació, el ángel dijo: doy nuevas de gran gozo que será para todo el pueblo, que ha nacido un Salvador que es Cristo el Señor.
¿Alguien quiere convertirse en oveja de veras? Reconozca sus pecados, arrepiéntase, reconozca que está perdido y acepte a Jesucristo como su personal Salvador, porque después viene el bautismo.
Hermanitas esposas, no le anden pullando al esposo para que se bautice, porque se va a negar; si usted está duro y duro, sólo se va a remojar; déjelo, es una cosa que tiene él que decidir.
¡Ándale viejito bautízate! ya ves que yo ya estoy lista.
Bueno, para que no me sigas molestando, dile al pastor que me anote.
El que dice: yo me quiero bautizar, es porque eso es fruto de su arrepentimiento. Una persona que cree en Cristo dice: no quiero nada con el mundo, el demonio y la carne ¿Qué hay que hacer? Me sepulto por el bautismo. La persona que es salva ya no quiere nada con la podredumbre; dice:
¡Yo me quiero bautizar! el bautismo es un funeral, lo dice la Biblia, es un funeral donde la gente se sepulta.
¿Ha visto usted fumar a un muerto? ¿decir maldiciones? ¿Cómo? si está frío, está tieso, por eso digo: sepultar, para que andemos en vida nueva. Esa es la oveja que se arrepintió, se bautizó para declararle la guerra al mundo, al demonio y a la carne. Es el hombre o la mujer que tiene juicio el que debe de pedirlo, no hacen falta compadres, ni ropa especial, ni padrinos, un buen arrepentimiento nada mas.
¿Sabe usted que en la Biblia hay tres personas que no se deben de bautizar?
Los locos ¿para qué bautiza a un loco? ha de pensar que lo están bañando, no tienen juicio; y uno que no está arrepentido tampoco.
Una vez en un bautismo, a la hora que llegaron las hermanas otomíes, una hermana toma su jabón y empieza a enjabonarse la cabeza; y luego estaba bautizando a unos que no hablaban español, cuando una hermana que brinca y que me abraza, porque "le dio miedo". Otra dijo: no me bautizo ¿por qué? porque si abró la boca y tomo agua ya me trague los pecados de los demás, y salgo con más pecados de los que llevé; no, no es así.
Ni los locos, ni los que no están arrepentidos, ni los niños; los niños son las personas más santas; bautizarlos ¿para qué? Si no son pecadores.
El bautismo es para el pecador que se arrepiente y lo pide ¿para qué un niño? La Biblia no habla de que los bauticemos. A un niño se le dedica al Señor, pero mucho más, que los padres se comprometan a mantenerlo limpio para el Señor.
Así que la oveja es una persona que se arrepiente y se bautiza; la fe en la oveja es la búsqueda de la voluntad de Dios; primero se arrepiente, luego pide el bautismo.
2) Se dedica a buscar la voluntad de Dios para hacerla:
Mucha gente pide el bautismo y algunos pastores cometen errores. Yo conocí a un pastor en Hermosillo que estaba en el bautisterio y decía: aquí hay agua ¿quien decide bautizarse? Y varios decidieron allí bautizarse, era la primer vez que asistían allí, la cosa no es así.
Id y haced discípulos dice el Señor, id y doctrinar; solo se pueden bautizar los que son discípulos, los que ya entienden, los que tienen juicio espiritual.
Cuando una persona verdaderamente se arrepiente, se bautiza, lo hace de corazón se convierte en oveja y se dedica a buscar la voluntad de Dios.
Los hombres y mujeres que de veras se han entregado tienen hambre de la palabra, como dijo el apóstol Pedro: desead como niños la leche espiritual para que por ella crezcáis ¿Qué tanto ama usted la Biblia? Si usted es oveja de Dios debe tener hambre de su palabra.
3) La oveja es una persona de oración:
Pocos han entendido la oración persistente; ir ante el trono de Dios, platicar con nuestro Padre, ¡qué tranquilidad! ¿Usted recuerda cuando era novio o si lo es ahora? Cuando usted está platicando con su prometida y le dicen a ella:, no llegues después de las nueve, porque te dan una paliza; aún así le gusta platicar con la persona amada.
Si nuestro Padre es amado de nosotros aquí está su carta de amor (la Biblia) ¿O no es la carta de Dios? ¡Qué palabras! Una hermana me decía: abro la Biblia y cierro los ojos ¿por qué? Porque me pongo a llorar.
Un hermano tenía la costumbre de soñar con versículos y los ponía en la pared; la tenía llena de citas, pero una vez se le olvidó el lápiz y oyó: Proverbios 4 y se levantó gritando "Proverbios 4, Proverbios 4", y le dice su mujer ¿qué pesadilla tienes? No, Proverbios 4, hasta que encontró el lápiz para que no se le olvidara la cita.
Hijos míos: estad atentos a la doctrina de un Padre, Dios le habla; las ovejas de Dios comen de la Biblia, no de los libros de espiritismo, de brujería o de sectas. Yo nunca he visto una oveja con la carita para arriba ¿verdad? Todas están con la carita para abajo; rara vez levantan su carita y las ovejas del Señor todo el tiempo están orando.
4) La oveja tiene comunión con las demás:
Una oveja solita comienza a balar desesperada, con tristeza, le gusta estar en el rebaño y su mansedumbre inspira a otros. Yo he conocido rancheros que quieren llevar un animal difícil, un burro, una bestia y no pueden; amarran a una oveja y ésta empieza a caminar dócilmente; un cristiano debe inspirar tranquilidad. Hay hermanos que me han dado testimonio de que personas inconversas se les acercan y les dicen: yo quiero platicar con usted; no sé, pero en usted se siente algo; creo que usted puede escuchar lo que me pasa; a las ovejas de Dios le gusta estar en comunión.
5) Si decidimos que Jehová es nuestro pastor no se nos olvide esto:
Las ovejas dan tres cosas: Lana, leche y ovejitas ¡Gloria a Dios!
Una vez en Ixmiquilpan un hermano me enseñó un borrego especial que le habían traído. No lo hubiera creído si no lo hubiera visto; estaba el animal gordo, gordo pero no era gordo, es que su lana tenía 10 centímetros, yo lo medí con el metro, 10 centímetros de lana tenía ese animal; así debemos de ser ¿verdad? Gorditos de lana pero para darla a Dios; así no nos acalorizamos; aquel borrego se quedaba en la helada afuera, porque aguantaba.
Dios no necesita su dinero, necesita de la obediencia suya.
¿Cuánto da usted para la obra? Yo tardé ocho años en aprender esto; no pagaba mis diezmos, era el jefe de los ladrones. Un día llegó el hermano Wayne Myers a la iglesia y predicó dos horas sobre el diezmo.
Yo dije: este hermano piensa que eso es parte de la trinidad, porque duro y duro. Pero empecé a pagar los diezmos, créame, fue diferente.
¿Somos de Dios o no? ¿Y lo que tenemos es o no de Dios? A los hermanos que
Dios ha hecho banqueros, empresarios, ¡Gloria a Dios! Siga de banquero, siga de empresario, pero recuerde que usted es un empleado, no es usted el dueño ¿Que tanto daría usted para la obra? Aprendemos con dolor.
Una vez estaban levantando una ofrenda en una iglesia, y yo traía un billete de a doscientos y siempre doy cien y dije: son doscientos ¡No! Yo siempre doy cien, es mi costumbre ¿por qué voy a dar doscientos? Pero se me hizo mal ir a cambiar y dije: bueno, ahí va el de doscientos.
¡Ay hermano! Tuve que llorar, terminando el culto me dice una hermana: hermano Castelazo que bueno que lo encuentro, quiero regalarle cien pesos (dice el Señor, que ahí está su vuelto) ¡Que terrible cosa hermano! Me costó lágrimas ¡Perdóname Señor! ¡Perdóname! ...ahí está tu vuelto, dice el Señor.
Las ovejas verdaderas del Señor dan lana, todo el tiempo están dando, a veces nada más damos la ofrenda. Decíamos que antes dábamos limosna y ahora damos ofrenda; nada mas le cambiamos el nombre, porque damos lo mismo.
La ofrenda es algo especial, la Biblia dice: diezmos, primicias, ayudas, ofrendas y el Señor llama ladrones no sólo a los que no pagan los diezmos, sino a los que no dan ofrenda también; le robamos al Señor en la ofrenda; el Señor ha dicho dad y se os dará; aprenda la gracia de dar, quítese de la cabeza eso de que "den los que tienen". ¡No Señor! Lea la Biblia, las personas que dieron más son las que tenían menos, tres viudas lo dieron todo.
La lana, la leche, las ovejitas son para los necesitados; toda oveja debe ayudar a los enfermos, a los pobres, a los ancianitos; no vaya con un ancianito y diga: ¡Ay Señor ten misericordia de éste que ya mero agarra camino! ¡No! Vaya y hágale la sopa, tiéndale la cama, barra la casa, déjele limpio; es la leche. Leche para los enfermos, leche para los necesitados, donde quiera hay gente pobre, gente necesitada, las ovejas de Dios aportan leche.
Y las ovejas de Dios ¿qué dan? Ovejitas. Un hermano recién se casó dice: mi mujer y yo acordamos que tenemos que llenar una banca (de esas ovejitas no hermanos, ese es asunto biológico). Me refiero a las almas que agregamos al Reino ¿Cuántas almas ha traído usted al Señor desde que se convirtió?
Yo desciendo por línea directa de una hermana viejita analfabeta, que le habló a mi suegra y mi suegra decía: no esté molestando viejita ociosa y no hallaba como quitársela de encima; un día vino a hablar del evangelio y le dijo mi suegra: mire viejita, no tengo tiempo, porque voy a mandar a comprar mi pulque ¿sabe que le dijo la anciana, a mi suegra? no se preocupe lindita, yo se lo mando traer ¿cuánto quiere usted? ¿medio litro? Y la viejita le mandaba traer medio litro y mientras mi suegra estaba tomando su pulque, la viejita le estaba hablando ¡y se salvó mi suegra! ¡Gloria a Dios!; ahora, no le digo que lleve "caguamas" para hablar del evangelio ¡No hermanos! Por favor. Eso fue sólo un ejemplo. Lana, leche y ovejitas.
Tuvimos un trabajador joven muy activo, un muchacho muy simpático; le dimos a pulir los pisos y él empezó a escuchar del Señor y se entusiasmó y fue al templo; luego le dijo a su esposa ¡Mujer ya encontré al Señor! Le dijo su mujer: no quiero que te metas allí, prefiero verte con otra señora que convertirte en evangélico; pues ni tardo ni perezoso buscó a otra y vimos cómo le cambió el rostro.
¿Qué te pasa? Claudio, le dije. Pleitazos dice, una semana estoy con una y si me peleo con ella, me voy con la otra... Una vez se peleó y cuando una de las señoras se fue al mercado, al regreso lo encontró colgado en una viga. Cómo nos impactó eso, un muchacho lleno de vida y todo porque la señora dijo ¡No quiero que seas evangélico!
Si usted rechaza al Señor es peligroso porque cuando Jesús murió, usted entró en la cuenta. En cambio si se entrega, todo es diferente; Dios hace cosas sorprendentes, yo he visto maravillas, la Biblia dice: aun hasta las bestias del campo serán pacificas.
Allá en Pachuca hay unas montañas donde acostumbraba ir a orar sólo, a las 4 o 5 de la mañana; a veces me iba sólo toda la noche. No se me olvida, una vez en la mañana me hinqué a orar, hacía un frío terrible y viene una zorrita y se sienta junto a mí. Me le quedé mirando, me daban ganas de acariciarla, me moví, y ahí estaba sentada la zorrita ¿cómo sabía que yo no era de peligro, qué yo estaba clamando al Señor? estuvo allí mucho rato sentada la zorrita hasta que se fue.
Allá en casa tenemos árboles frutales y había una guanábana que se estaba secando; y mi esposa me dice: Este arbolito se está secando, voy a orar para que el Señor lo alivie de cualquier plaga; se recargó en el árbol y empezó a orar y dice que cuando abrió los ojos estaban varias gallinas alrededor con el pico hacia abajo ¡Gloria a Dios! Le pregunté :¿había maíz o qué? Nada dice, era el puro cemento y ahí estaban las gallinitas con el pico abajo. Dice mi esposa: yo me puse a llorar y dije, si no oyes mi oración a lo mejor oyes la oración de las gallinas, y el árbol no se secó, florecieron la guanábanas; Dios escuchó a mi esposa y a las gallinas también.
Mi hija tiene un orfanatorio, con más de cien niños de la calle, no huérfanos, sino niños de hogares en conflicto; se los ha entregado la Procuraduría del Estado; cada uno tiene un expediente y los manda a la escuela; la escuela está como a dos kilómetros entre el monte y van allí a la primaria. Un día venían todos agarrados de la mano y pasan cerca de un árbol y ven un pajarito cante y cante; que se juntan todos ¿qué tendrá ese pajarito? ¿qué le dolerá? ¿o está cantando al Señor? No, es que estaba una víbora venenosa ahí enfrente ¡Bendito sea el Señor! ¡Aleluya! Y ese pajarito lo mandó el Señor para detener a los niños, los hombres vinieron y mataron la víbora, cuando mataron la víbora el pajarito se fue.
Muchas señales hay cuando nos entregamos al Señor, si usted se convierte en oveja no se imagina cuantos cuidados, cuantas bendiciones recibirá del Señor.
Eso es lo que dice la palabra del Señor: los cabritos a la izquierda, las ovejas a la derecha; los cabritos al tormento eterno, las ovejas a la vida eterna.
Y nosotros los que servimos a Dios, tenemos que ajustarnos a lo que el Señor ha dicho en su palabra, muchas veces queremos hacer muchas cosas para ver como crece la iglesia, para ver como adelanta, ¡No por favor! Le decía a los hermanos, que un grupo de pastores se reunió en Hidalgo para que yo les dijera como crece la iglesia, pongan atención les voy a decir cómo: Siendo cristianos, nada mas.
Agárrese de la palabra de Dios, su iglesia tiene que crecer ¿o no? ¡Seguro que tiene que crecer!
Yo le digo a los pastores: no construyan, compren terreno ¿terreno? pero si somos unos cuantitos; bueno ¿qué todo el tiempo van a ser esos cuantitos?
Cuando íbamos a edificar un auditorio en Tuxtla, las autoridades vieron los planos y me dijeron: necesita usted un estacionamiento para 500 carros. Les digo: Señor, usted sabe que la gente aquí es pobre, los hermanos no tienen ni burro ¿cómo está usted pensando en 500 carros? y me dijo el señor: pero y ¿que tal en el futuro? Perdóname Señor, aquella autoridad tiene más fe que yo. Y sí, compramos otro terreno y lo hicimos colegio porque no hay carros, va mucha gente al auditorio pero hay unos 20 carros, 25 cuando mucho.
Nuestro ministerio es trabajar por la gente para que se conviertan en ovejas del Señor, pero si queremos que se conviertan en ovejas del Señor, necesitamos tener fe, necesitamos tener confianza, necesitamos hablarles de lo que el Señor puede hacer con ellos, necesitamos decirles que Dios los ama, que hay perdón para sus pecados, que hay salvación.
Gran parte de las mujeres en nuestra iglesia tienen maridos terribles, pero las hermanas se afianzan del Señor y le sirven en el comedor. En nuestro auditorio trabajan más de 120 personas, para limpiar 1000 bancas, hay jardines afuera y la cocina y los sanitarios, más de 120 personas, y ninguna recibe remuneración. Lo hacen en agradecimiento al Señor.
Cuando empieza noviembre, empiezan a hacer su solicitud: "quiero este trabajo para el año que viene, quiero limpiar doscientas bancas"; se le asignan y firma, y para evitar una guerra civil firma el marido también.
Y fíjese que cuando trabajan para Dios, hasta están contentas. Una vez un hombre inconverso vino a ver a mi esposa y le dijo: Doña Luchita, mi esposa viene aquí; quiero que le dé trabajo porque cuando usted le da trabajo no me echa pleito y está muy contenta, pero cuando no trabaja ¿no se que le pasa?
Tuvimos que poner dos veladores porque cuatro veces han asaltado el auditorio, han roto las puertas, pensando en encontrar dinero. Pusimos dos veladores, se les dan trescientos pesos a cada uno de ellos y mil pesos de ayuda a dos representantes legales, nada más; al jardinero y a todos los demás no se les paga y cada uno compra sus cubetas, sus trapeadores, sus jabones, su papel de baño ¿y sabe qué? cada vez que van a trabajar hacen oración, cantan y recogen ofrenda. Cuando termina el año juntan todas las ofrendas y dan otra ofrenda especial y vienen y le dicen al Señor: "Señor, un cariñito por habernos permitido trabajar para ti"; así que en lugar de pagarles, ellos dan.
Las hermanas tienen una cocina donde preparan taquitos, tamalitos, martes y jueves y entregan cerca de diez mil pesos cada mes; es mucho dinero para ellos que son tan pobres. Y allí están trabajando, ellas han comprado refrigerador, cocina, congelador, todo; esas son ovejas, dan lana. Las ovejas del Señor son muy útiles.
Oren conmigo:
Padre, te agradezco porque enviaste a Jesús el buen Pastor; quiero en este momento que Jesús sea mi pastor, declaró a Jesús mi pastor, es mí pastor, mi bendito pastor. Quiero ser oveja en el terreno de los hechos, concédemelo, ayúdame a dar más dinero para tu obra, porque tu obra lo necesita.
Señor, concédeme servir a los necesitados, a los débiles, a los ancianos, a los enfermos ¡OhPadre! Dame sabiduría, dame entendimiento para traerte ovejitas, para traer almas a tu santo templo, a tu gracia
¡Bendito seas Señor! porque tú me hiciste oveja; habiendo sido cabrito tú me hiciste oveja, ¡Gracias Señor! Gracias por ese cambio, tú eres mi pastor y tú vas a cuidar de mí y te vas a hacer cargo de mis problemas porque yo soy tu oveja y tú eres mi pastor.
Te alabo Señor, te glorifico ¡Aleluya! Amén.
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En caso de considerar que estos comentarios al tema comentado, sean bendición o utilidad para los hermanos que están tomando el curso de liderazgo en nuestra iglesia o congregación, le solicito pueda hacerse extensivo también a ellos.
Que Dios lo bendiga.
Su Hermano en Cristo: José Manuel G.Sosa
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